Las relaciones sexuales sin penetración o petting en la adolescencia se suelen realizar a escondidas en casa de los padres cuando no están, o sino en parques, playas, o donde sea posible. Una actividad furtiva donde las siempre revolucionadas hormonas de los adolescentes les llevan a simular el coito aún con la ropa puesta.
Parte de este entrenamiento o simulación, por llamarlo de alguna manera, puede ser el sexo intercrural. Una práctica donde el chico puede frotar su pene entre los muslos de la mujer simulando una penetración en diferentes posturas. Con una buena lubricación resulta bastante placentero, excitante y hasta cierto punto bastante similar al coito.