A la hora de escoger pareja algunas personas se muestran más exigentes que otras, tanto hombres como mujeres buscan unas determinadas características y aptitudes en la otra persona para poder considerarla como una posible pareja, esto a veces lo hacemos de manera consciente y otras sin darnos cuenta, de hecho curiosamente a veces la elección no depende tanto de nosotros, sino que nos dejamos influir por nuestro entorno.
Esto no es nada raro, de hecho otras especies del mundo animal, sobre todo pájaros y peces, lo hacen cuando prestan atención a las preferencias de los demás con el objetivo de escoger lo mejor, algo así como que: lo que es bueno para otros debe serlo para mi también…
Para demostrar que los humanos también nos dejamos influir a la hora de escoger pareja, unos investigadores de la Universidad de Indiana han realizado un estudio con 40 hombres y 40 mujeres, a los que se les mostraba la foto de personas del sexo opuesto, y a continuación ocho videos de citas rápidas donde estos participaban.
Por si no sabes en qué consiste una cita rápida, te cuento que se trata de pequeños encuentros de solo unos minutos de duración donde ambas personas tienen el tiempo justo para presentarse y exponer sus intereses, la idea es conocer a muchas personas en poco tiempo y luego escoger a quienes queremos conocer más en profundidad.
El caso es que, tras visionar los videos, los participantes del estudio debían mojarse y predecir si la cita fue un éxito, así como si ellos mismo estarían interesados en conocer a esa persona. Curiosamente los hombres en general mostraban más interés después de haber visto el video, y su interés era aún mayor si el hombre del video se mostraba interesado en la mujer.
Las mujeres en cambio incrementaban su intereses si la mujer del video se mostraba interesada, pero a diferencia de los hombres, las mujeres perdían notablemente su interés si la mujer del video no se mostraba interesada en ese hombre.
Por otro lado, en el caso de los hombres resultó curioso descubrir que nos dejamos influir más por hombres atractivos, es decir, si un hombre guapo muestra interés en una mujer, su influencia será mayor en nosotros que si fuera un hombre feo o menos atractivo el que mostrara interés por esa mujer.
Para los investigadores, la explicación de todo esto sería que fruto de nuestra evolución hemos desarrollado mecanismos que nos permiten aprovecharnos de la información adicional que nos proporciona nuestro entorno, una especie de atajos cognitivos que nos permiten ganar tiempo y que en el caso de las citas nos empuja a copiar la elección de los demás, aunque estos sean unos completos desconocidos.
Este comportamiento también explicaría por qué algunas personas famosas son deseadas como pareja, o por qué algunas personas son más deseables cuando están en pareja que cuando están solteros y disponibles.