
Se me ocurren varias opciones de por qué este hombre decidió empotrar su automóvil contra las puertas de un sexshop para robarse un juguete erótico, sin embargo es tal la cadena de errores que seguro le hubiera salido más barato comprarlo por Internet.
Quizás sea que la crisis aprieta ya demasiado y uno no se puede permitir ciertos sextoys, quizás sea que le daba vergüenza pasar por caja, pero sea cual sea el motivo jamas se puede ser tan torpe a la hora de robar.
Quizás los nervios le jugaron una mala pasada, para empezar no se preocupó de tapar las placas de la matrícula, tampoco tuvo en cuenta que habían cámaras fuera y dentro de la tienda, y para rematar la faena, una vez que está dentro, en lugar de robarse un poco de todo, va directo a la estantería donde está el juguete erótico que busca.
Pero ahí no queda la cosa, el tipo se equivoca de juguete y entonces deja la caja en el suelo y coge el que buscaba de la estantería. El coche mientras sigue avanzando, y no es que vaya acompañado, es que se le olvidó poner el freno de estacionamiento!.
Con lo fácil que es comprar en total discreción a través de Internet, no entiendo como uno puede lanzarse a realizar esta locura por un sólo sextoy. Por descontado que antes o después le encontrarán, ya no sólo por las placas del automóvil, es que está claro que visitó la tienda anteriormente ya que sabía perfectamente donde estaba su sextoy favorito.
Increíble pero cierto, este “alunizaje” tuvo lugar en una tienda AdultMart de Amherst (Ohio), donde el ladrón arrasó todo un sistema de seguridad valorado en 20.000$ para finalmente robarse un juguete de 300$. Además como si de un auto servicio se tratara entró por un lado y salió por el otro llevándose por delante un total de seis puertas más los correspondientes sistemas de alarma.
Lee la noticia completa en Chronicle Telegram