Ya no sólo en el ejercito español, sino en muchos otros ha circulado durante años el rumor sin que al parecer se haya desmentido jamas de manera tajante. Realmente son muchas las leyendas urbanas que circulan acerca del servicio militar y una de ella es si se daba bromuro en el ejercito para calmar el deseo sexual.
El que se empleara bromo no es nada descabellado puesto que desde el siglo XIX los doctores empleaban el bromuro de potasio y el bromuro de sodio como antiepilépticos. En aquella época se pensaba que la epilepsia estaba ligada a la masturbación, y como el bromo calmaba la excitación sexual pues se dio por bueno.
También se empleó como desinhibidor del deseo sexual para hombres que habían pasado por una operación de pene, cosa de evitar una erección que desbaratara el trabajo del cirujano. Con el paso de los años se dejó de utilizar por sus efectos secundarios, aunque aún hoy en día se sigue permitiendo en algunos países, como por ejemplo Alemania.
Además el bromuro de sodio es en apariencia muy similar a la sal común, con lo cual no sería difícil mezclar ambas sustancias en cierta medida sin ocasionar daños en el organismo. Sin embargo al no ser administrado en dosis concretas se correrían riesgos y por tanto esto no tiene mucha consistencia si echamos un vistazo a los efectos que provocaría.
Si bien disminuye el deseo sexual, también provoca sedación y descoordinación. Personalmente dudo mucho que un comandante quiera tener soldados aturdidos tanto a la hora de realizar entrenamientos como a la hora de entrar en combate, es como si el ejercito tirara piedras a su propio tejado. Oficialmente hasta que no se desmienta y se pruebe el rumor seguirá circulando, de hecho hoy en día se sigue bromeando en los cuarteles sobre esta cuestión.