El tema de los juguetes sexuales aún hoy en día es algo que no termina de convencer a muchas personas, tanto hombres como mujeres de todas las edades, de esto uno se da cuenta cuando conoce nuevas personas y acaba saliendo el tema (no lo puedo evitar es ya deformación profesional…). Si bien algunos se muestran receptivos, otros se agarran directamente a la excusa de “yo no necesito eso” o “teniendo uno de verdad, para que tener uno de goma”.

Esto es así, y tampoco se trata de evangelizar a nadie, Dios me libre de tal misión! Pero mi punto es el que ya he comentado en más de una ocasión, se trata de un complemento, como su nombre indica es un juguete, e igual que un niño no necesita un juguete para divertirse, sí tenemos claro que con un juguete puede crear nuevos juegos…

Si te empieza a picar la curiosidad, pero no sabes por donde empezar, una buena opción podría ser un vibrador pequeño pero versátil, como por ejemplo el conejo rampante Bullet Bunny, una pequeña preciosidad en color rosa que se ha sacado de la manga la marca británica Rocks Off.

Lo de conejo rampante puede que te suene raro, pero si te fijas verás que en la base del vibrador tiene esa protuberancia con forma de conejito a dos patas, lo cual no es una mera decoración, la función de ese conejito es jugar y estimular tu clítoris hasta hacerte llegar al orgasmo, mientras puedes introducir el vibrador en la vagina para disfrutar de las fricciones de la penetración, así como de las vibraciones que se transmiten a las paredes de la vagina y por supuesto al punto G.

Pero ahí no acaba la cosa, este conejito rampante tiene ritmo y bucea… me refiero a que es capaz de funcionar en cinco modos de vibración diferentes y si quieres te lo puede llevar a la ducha para jugar a solas o con tu pareja, así para cuando salgas de la ducha vas a estar mojada por fuera y por dentro, lista para seguir la fiesta en la cama o donde encarte.

Para que te hagas una idea, este conejito rampante tiene unos 17 cm de largo, de los cuales puedes usar hasta once para la penetración, y de grosor tampoco va mal servido con sus 3,5 cm de ancho. A la hora de lavarlo será tan fácil como retirar la funda rosa y darle un enjuague.

Si te quieres comprar un conejo rampante Bullet Bunny pásate por el buscador de Coompra.com para ver ofertas, pero ya te digo que su precio ronda tan sólo los 30 euros.