Para disfrutar de un baño estimulante a una se le vienen a la cabeza cosas como las sales de baño, un jacuzzi o una bañera con hidromasaje con el agua cubierta por espuma o pétalos de rosas, e incluso algunas velas aromáticas, pero es posible que ni se te pase por la cabeza que existe un juguete erótico llamado esponja vibradora!.
Efectivamente, aunque no lo creas, ya no sólo en los pintalabios, en los cepillos de dientes o en los patitos, ahora también en las esponjas puede haber un vibrador. Quizás te preguntas, ¿y para qué quiere una algo así? Pues lo mismo sirve para darse un masaje por el cuello y los hombros durante un baño relajante, como podemos sumergirla hasta nuestras zonas erógenas para disfrutar de húmedos placeres.
Si no se te ocurre qué regalar a tu pareja puede ser una idea divertida que podéis disfrutar ambos, sobre todo cuando compartís la ducha o la bañera. Lo único que tienes que hacer es dejarte acariciar por la esponja, sentir como el agua recorre tu piel, al tiempo que las vibraciones estimulan tus músculos y terminaciones nerviosas.
Son muy fáciles de usar y mantener, no vas a tener que limpiarla después de cada uso y suelen funcionar con un par de pilas que se insertan en un compartimento estanco para que el juguete no se dañe.
Como ves en la imagen de arriba, se puede tratar de esponja vibradora con forma de fresa, aunque si echas un vistazo al escaparate de coompra.com verás que existen otros modelos, todos a partir de unos 15 euros y con vibradores que funcionan a distintas intensidades.