La garganta profunda o deep throat es una práctica que no está nada fácil, se trata de una variante de sexo oral donde se pretende introducir el pene completo por la boca cuando este está en erección, lo cual obliga a llegar hasta la garganta.

Sin duda dominar el arte de la garganta profunda requiere de mucha práctica y control del reflejo del vómito. Para ello siempre será importante estar relajado, y relajar los músculos de la garganta y la boca, y especialmente la lengua.

Una opción interesante a la hora de hacer una garganta profunda puede ser el utilizar lubricantes comestibles, los hay de diversos sabores que os serán muy útiles ya que facilitan la penetración y dan un agradable sabor.

Por otro lado, antes de lanzaros a devorar un pene, más vale practicar, y para ello nada mejor que los dildos flexibles. Casi mejor olvidate de las frutas y verduras para entrenate, ya que en un momento dado podrían deshacerse o partirse y dar lugar a un ahogamiento, y ver que ponemos luego en tu epitafio…

Fuera de bromas, realmente lo suyo es practicar con un consolador de un grosor inferior al de un pene. Lo que tenemos que hacer es empujarlo suavemente hasta el final de la boca, y una vez allí hacer como si tragáramos para accionar el mecanismo de la garganta que permitirá que la punta entre.

Todo esto será en balde si no te relajas, ya que si estas nervios@ vas a contraer los músculos y acabarás teniendo arcadas de tanto rozar la campanilla de la boca. Para tener éxito en la garganta profunda lo primero es relajarse, y lo segundo practicar mucho, ya sea con consoladores o con el pene de tu pareja.