De los que podríamos denominar juguetes eróticos camuflados o discretos, el Chateau Blanc de X-tassie está entre uno de los mejores que hemos visto hasta ahora. Perfecto para sorprender a más de una en una velada romántica, o para tener escondido en la cava junto a nuestros mejores vinos sin levantar sospechas.

Sin duda el Chateau Blanc es un producto innovador, que además tuvimos ocasión de ver en la Venus Berlín. Para que te hagas una idea, mide 17 cm de alto por 4 de ancho, es decir, es más o menos del tamaño de una botella de vino de las de 37 cl.

En su interior se esconde un vibrador liso de silicona con unas pequeñas verrugitas. Este lógicamente es un poco más pequeño que la botella, teniendo unos 12 cm de largo por casi 3 de ancho.

Chateau Blanc te puede hacer llegar al orgasmo a través de sus diez modos de vibración diferentes, y cuenta con baterías recargables que dan para un par de horas de diversión y que podrás recargar por USB. Es bastante silencioso, y muy fácil de manejar, ya que cuenta con un solo botón para encenderlo, apagarlo, o cambiar los modos de vibración.

Personalmente me encanta la idea, me parece de lo más divertido, puedes invitar a tu chica a cenar en casa o decirle que vais a catar unos vinos nuevos que te han recomendado, primero le pones unas copas de tinto o blanco de verdad, y luego cuando ya estáis más desinhibidos puedes sacar tu botella de Chateau Blanc y dejar que ella la abra…

En cuanto a X-tassie, se trata de un fabricante coreano de juguetes eróticos como Cocomini, y es que aunque están en el lejano oriente, poco a poco son más las marcas japonesas como Tenga o coreanas como Zini o la propia X-tassie las que van desembarcando en Europa para aportar cosas nuevas a esta revolución que venimos observando y disfrutando en los últimos años en este tipo de artículos para adultos.