Todos sabemos que la falta de lubricación en una relación sexual es síntoma de una insatisfacción y en algunos casos puede ser doloroso.
Muchas veces por falta de tiempo, obviamos el “warm up” (calentamiento previo) y vamos directo al coito. El saltear este paso tan importante, es síntoma de que la vagina y el pene no lubriquen lo suficiente, y podamos notar una cierta incomodidad a la hora de la penetración.
Tambien otros casos por los cuales no lubriquemos lo suficiente pueden ser:
- Diferencias individuales. Algunas mujeres producen menos lubricación vaginal que otras y se sienten anormales, pero si esto no es causado por algún desajuste hormonal o alguna enfermedad no hay por qué preocuparse.
- Edad. Las hormonas sexuales femeninas (estrógenos) son fundamentales para que la vagina se lubrique adecuadamente. Recuerde que estos agentes disminuyen progresivamente y declinan notablemente hasta que desaparecen por completo en la menopausia (periodo que inicia con la última menstruación), causando sequedad vaginal persistente, lo cual, sin embargo, puede aligerarse con la llamada terapia de reemplazo hormonal.
- Ciclo menstrual. La acción de los estrógenos influye también en la cantidad de la lubricación, así como en su viscosidad, lo que explica que dichas secreciones sean diferentes en una misma mujer durante distintos períodos del mes.
- Estrés. Todo, desde las dificultades en el trabajo hasta las tensiones en una relación amorosa, puede interferir con la respuesta sexual y, por ende, en una buena lubricación.
- Medicamentos y drogas. Se sabe que diversos fármacos, sobre todo algunos antidepresivos, entorpecen la humectación de la zona vaginal; lo mismo ocurre con los antihistamínicos (que combaten alergias), algunas medicinas para el resfriado y otras cuyos efectos secundarios provocan sequedad en la boca. Es importante puntualizar que el alcohol, tabaco y marihuana también se consideran inhibidores de la lubricación; igualmente, algunas mujeres reportan que las pastillas anticonceptivas reducen su capacidad de producir lubricación.
Para evitar esto, es importantísimo el uso de lubricantes sexuales ya que estos harán que la penetración sea muy placentera, y también podrán otorgar un plus de aromaterapia. Quien no se preocupa por los olores a la hora ?, y hoy en día podemos encontrar en sex shops, lubricantes con los siguientes sabores: Lubricante Fresa , Lubricante Cereza , Lubricante Arandano , Lubricante Vainilla , entre otros… De mas esta decir que son ideales para el sexo oral.
Para el caso de sexo anal, tanto en parejas heterosexuales como homosexuales, es indispensable el uso de un Lubricante Anal , ya que como todos sabemos el ano no lubrica por sí sólo.
Os animo a que probéis alguno de estos lubricantes, y sintáis la diferencia, de seguro que será un avance con vuestra pareja, para mi caso personal es un antes y un después, hoy en día los tengo y de todos los sabores…