Magic wand o varita mágica no es un juguete erótico discreto porque de hecho no fue concebido para serlo. El original fue diseñado y comercializado durante años por la compañía japonesa Hitachi, sin embargo ellos lo han vendido siempre como un simple masajeador (el Magic Wand HV-250R), y si le cuentas esto a cualquiera que lo vea probablemente no te crea.

Es de suponer que un día alguna de sus clientas excitada por el momento o las vibraciones decidió probarlo entre sus piernas, el resultado fue tan espectacular que acabó convirtiéndose en un juguete erótico de culto. Hoy en día se pueden encontrar magic wand de diferentes fabricantes que no han querido desaprovechar la efectividad del original, y que además en algunos casos lo han mejorado añadiéndole baterías o un mejor acabado.

Sin embargo valorándolo como un juguete erótico tiene varias pegas. Por un lado su tamaño, está claro que no es algo que vas a llevar en el bolso normalmente pero en comparación con otros éste es realmente grande, y más aún teniendo en cuenta que la parte útil es sólo su cabeza, ya que no es apto para penetraciones. Da la impresión de que tienes la minipimer entre manos.

Por otro lado, este masajeador funciona principalmente conectado al enchufe, con lo cual está claro que no te lo puedes llevar a la ducha… pero es aquí donde hago el punto de inflexión, ya que el hecho de conectarse directamente a un enchufe le permite ofrecer una gran potencia de vibración, para algun@s quizás demasiado.

Como masajeador es excelente, tiene dos modos de vibración diferentes que relajarán cualquier músculo. Como juguete erótico su fama lo precede… este inocente masajeador es capaz de hacerte llegar al orgasmo en pocos minutos, ¿es algo realmente mágico? Pues va a ser que no, su secreto está en proporcionar unas vibraciones más intensas y profundas que otros vibradores.

Lo podéis usar de muchas maneras diferentes, lo ideal es que experimentéis y os dejéis llevar. Como os comentaba tiene dos velocidades de vibración: cuando funciona en modo intenso para algun@s es un poco salvaje como para usarlo directamente sobre el clítoris, así que lo podéis usar con las braguitas puestas o liándole un trapito o toalla a la cabeza. Cuando funciona en modo normal, es algo simplemente orgásmico.

Por cierto, en cuanto al precio, dependiendo del modelo actualmente os podéis hacer con magic wand por unos 50€.