Ya os he comentado en más de una ocasión la inagotable creatividad de los fabricantes de productos eróticos. Una vez más damos con un juguete realmente particular, se trata del Phoenix de Magma Toys, capaz de endurecerse y calentarse por si sólo.
Pero vayamos por partes, como dijo Jack. Por un lado tenemos el dildo, que en este caso viene relleno de un líquido rojo, y por otro lado tenemos el cilindro negro que es la unidad vibradora y donde van las pilas. En su interior flota un disco metálico que tendremos que presionar cuando queramos que Phoenix cambie de estado.
Como si del Ave Fénix se tratara, éste vibrador pasa del estado líquido al sólido en cuestión de segundos, alcanzando hasta 38º de temperatura. El efecto es bastante divertido y recuerda a las lámparas de lava que eran tan populares hace unos años.
Para devolverlo a su estado líquido tendremos que hervir el dildo durante unos minutos, sé que es un poco extraño pero son cosas de la física y la química… En cualquier caso el fabricante asegura que el proceso se puede repetir tantas veces como uno quiera y Phoenix se seguirá calentando y endureciendo como el primer día.